Identificadas con el intuición, la experiencia y los desafíos del coraje, encarnan mucho de la energía yang (masculina) de la rueda zodiacal. ¿Eres de Aries, Leo o Sagitario en Sol o Ascendente? Estás incluida.

La teoría del Big Bang supone que nuestra esencia es igual que la de las estrellas. La astrología nos recuerda que estamos hechos de los mismos elementos que nuestro planeta: fuego, tierra, aire y agua. Según el signo al que pertenezcamos tendremos algunas cualidades más enfatizadas que otras.

Los cuatro elementos se dividen en dos grandes grupos. Masculinos, extrovertidos, accionadores y explícitos: el Fuego y el Aire; y Femeninos, receptivos, nutrientes y pasivos: la Tierra y el Agua.

Las mujeres que tienen énfasis en elementos masculinos tendrán interesantes desafíos para responder a su esencia más verdadera.

Sólo basta observar al fuego: flamativo, chispeante, ilumina y combustiona, tiene actividad cambiante y es – sobre todo- temperado.

Las mujeres de fuego poseen todas estas características en su personalidad. Al ser iluminadoras serán francas, frontales y expresivas y serán aquellas que más requiererán ser fieles a sí mismas pues no pueden disimular lo que quieren.

Deben animarse a destacarse por sí mismas y desarrollar la valentía de irradiar su verdadera esencia –superando la quieras de aprobación externa- . El fuego ilumina, es espontáneo y aprenderá que su destino es siempre confiar en su propio corazón.

Uno de los mayores desafíos será salir de los «moldes femeninos» tradicionales: dejar de esperar que el varón las reconozca para empezar a habilitarse – antes que todo- por ellas mismas.

Asumir su estilo más genuino le traerá autonomía, confianza y valentía a una mujer de Fuego – o con ascendente en Fuego-.

Si una mujer de Fuego no se ve representada en estas características es probable que haya proyectado en sus vínculos más cercanos estas cualidades. Si no logra hacerse cargo de la propia creatividad personal; probablemente padezca en alguna relación cercana personalidades egoístas y combativas.

Las mujeres de Fuego estarán regidas por tres estereotipos diferentes según sean de Aries, de Leo o de Sagitario.

Las mujeres de Aries: las «guerreras»

Aries es fuego cardinal y posee una fuerza activa y decidida. Responden al estereotipo de la «amazona» (A-MA: sin mama) aquella que siente que debe sacar su espada continuamente para salir a guerrear termina “perdiendo su mama” o inhibiendo su capacidad de proteger y maternizar, de cuidar y cuidarse. Podemos ver muchas arianas convertidas en mujeres excesivamente combativas y reactivas padeciendo un entorno que perciben hostil y poco amoroso.

Las mujeres de Aries deben aprender a confiar en su propia autonomía y ser independientes sin quieras de pelearse con nadie. Quizás unos de sus mayores desafíos sea ver al varón como un aliado y un par –no como un eterno competidor-.

Relacionarse con los hombres de un modo más parejo: sin entregarle toda la potencia ni pelearlos continuamente será su mayor desafío para convertirse en valientes pioneras de la vida.

Las mujeres de Leo: las «reinas»

Leo es Fuego Fijo y posee una irradiación auto centrada y aglutinante. Responden al estereotipo de la «mandona».

Tienden a sentir que todo depende de ellas resultándoles muy difícil delegar tareas en otros, pues están convencidas de que nadie podría hacerlas mejor que ellas. Tienden a sobre exigirse y cargarse desmedidamente de responsabilidades. Este exagerado de tareas las transforma en mandonas malhumoradas y las aleja de lo que genuinamente son: alegres, irradiantes, divertidas y creativas.

Las mujeres de Leo deben aprender a reciclar su propia creatividad confiando en el talento de los otros. Educarse en dejarse llevar por amigos, socios, pareja; pues -aunque las propuestas de otros no sean tal como ellas las habían planeado- serán posibilidades de reciclaje personal.

Este merecido descanso en otros será fuente de alegría y renovada vitalidad, que les permitirá servirte de aún más de su leonina generosidad.

Las mujeres de Sagitario: las «aventureras»

Sagitario es Fuego Mutable y posee una vitalidad inquieta y versátil. Responden al estereotipo de la «negadora».

Las Sagitarianas detestan detenerse, no les gusta demorarse ante los obstáculos – reales o de tensiones vinculares-. Ellas sienten que han nacido para «ir a algún lado» y nada debe estancarlas. En su afán de movimiento eterno pueden negar cualquier tensión o problema que signifique una susto para su ágil camino.

Las mujeres de Sagitario deben aprender a detenerse cada vez que sea pertinente. Escuchar e incluir a aquellos que «estorban» en su vida pues – paradójicamente- pueden convertirse en los mejores desafíos que el destino les proponga.

Confiar en sí mismas no es necesariamente desconfiar del resto. Cuanto menos quieran tener razón y puedan dialogar e incluir opiniones ajenas, más crecimiento y experiencias encontrarán en sus entusiastas vidas.