Cuántos de ustedes están sintiendo que la frecuencia se ha amplificado en estos últimos días?

Cuántos sienten que el diálogo mental parece más difícil de detener?

Los miedos más profundos, los que tienen su origen más allá de todo, en y más allá de “las vidas pasadas”, puede que estén presentándose.

Para ser vividos?, para ser sufridos? No!…., para ser superados!

Hacia finales de Septiembre, todo nuestro mundo entrará en una nueva frecuencia. Será un principio. Mucho es lo que se anuncia.

Hoy vamos a intentar reducirlo a lo más sencillo, para poder explicarlo.

Si arrojas mucha agua limpia en un vaso que tiene residuos en su fondo, los residuos suben a la superficie. Estamos ante una nueva “movida de residuos”. Las rabias que no pudimos vivir, la impotencia que experimentamos tantas veces, que al final nos pareció “natural”, los miedos, la soledad, el sentimiento de que no hay otros seres humanos en este mundo que puedan acompañarnos a fondo y comprendernos.

Simplificando más. Estamos entrando en el oleaje de una nueva energía, y nos estamos limpiando.

Cómo respondemos a esta nueva “lavadora” multidimensional?

Priorizando el Ser sobre el Hacer.

Cuidando nuestro cuerpo-templo por encima de todo, manteniendo nuestro ambiente limpio, tanto física como energéticamente.

Meditando, danzando, buscando actividades que nos conecten con el gozo y acudiendo a la ayuda siempre presente y creciente en frecuencia de la Naturaleza. Si no podemos salir de la ciudad, cuidemos las plantas del jardín, juguemos con nuestras mascotas, o meditemos soñando despiertos que nos apoyamos en un Gran Árbol.

Volviendo a lo sencillo. Cuando paro todo y dedico unas horas a bordar, puedo encajar las otras tareas, mi mente ha descansado, y veo soluciones que antes no podía ver.

Reuniéndonos y hablando con las almas hermanas que puedan comprendernos. Pronto, muchos van a venir a nosotros en busca de ser escuchados.