Este ritual es sencillo pero ayuda a liberar las cargas que a veces no nos dejan avanzar. Ahuyenta la bajón y la tristeza.

Necesitamos:

– 1 vela blanca
– 3 velas moradas
– 1 vela pequeña negra

– Agua
– Un olla o jarro
– Esencia de lavanda

– Esencia de cedro
– Incienso de lavanda

Pon tu nombre en la vela y la unges con la esencia de cedro, ponla en el altar y enciéndela.

Agrega un poco de agua al jarro y déjalo junto a la vela en lo que enciendes el incienso y unges con la esencia de lavanda las velas moradas, ponlas en un plato y déjalas en el altar.

Pásate la vela negra por todo el cuerpo mientras piensas como se lleva lo malo, ponle 3 gotas de esencia de cedro y 7 de lavanda.

Enciende la vela negra al tiempo que dices:

«esto se lleva mi tristeza»

Toma el jarro y dentro de él, grita, reclama y dile todo eso que te molesta, no te contengas, saca todo lo que puedas.

Cuando te sientas lista saca el jarro de tu casa y aviéntalo lo más lejos que puedas, ve que rompa todo.

Las velas moradas se quedan en el altar hasta que se consuman las otras.