Siguiendo con esta interesante exposición y como lógica del post de ayer, el siguiente tema a tratar es cómo se expresa el bloqueo en la fisicoidad femenina y mañana añadiré el bloqueo en la fisicoidad masculina.

Bloqueos en la fisicoidad femenina

Ahora hablaré de los bloqueos energéticos en el área de la fisicoidad, los cuales se aplican específicamente a mujeres u hombres. En las mujeres, el área del primer y segundo chakra (sacro y ombligo) es la más apaleada y perjudicada como resultado de opresión fisico y malestar a lo largo de los siglos. Realmente por unos cuantos milenios, las mujeres han sido enmarcadas en un rol subordinado en casi todas las áreas de la sociedad, y esto aún prosigue en muchos lugares de la tierra.

Con respecto a la fisicoidad, esta inequidad se manifestó como violación, agresión y humillación a una gran escala. Como resultado de esto, muchas mujeres, en verdad el alma femenina colectiva, ha sufrido increíblemente. Hay profundas perjudicadas emocionales, las cuales requieren tiempo, amor y sumo cuidado para curarse.

A menudo, el impulso para la unión fisico es sentido por las mujeres como una añoranza del corazón, o como un sentimiento espiritual. Pero cuando ellas logran la privacidad física, ellas pueden encontrarse con que no pueden expresar su energía fisico libremente, debido a bloqueos energéticos en el primer y segundo chakra.

Hay recuerdos (en el alma) en esos centros energéticos de ser obligadas a tener experiencias fisicoes que las humillaron.
Estas experiencias fueron tan dolorosas, que la mujer retiró su energía, su consciencia del área del vientre. Cuando ahora ésta parte del cuerpo es abordada otra vez de un modo fisico, los músculos instintivamente se contraen o el cuerpo emocional automáticamente indica resistencia.

Las células físicas son conscientes del trauma y no siguen tan fácilmente con la invitación a danzar. Ellas quieren aislarse y crear una barrera para protegeros a vosotras de más agresión. Esta reacción es totalmente comprensible y siempre debería ser tratada del modo más respetuoso. Usar cualquier clase de fuerza para eliminar la resistencia, es una manera de violar nuevamente los centros perjudicados.

Cuando vosotras, como mujer, tenéis estas emociones, es muy importante llegar a estar completamente conscientes de ellas: puede haber ira ahí, resistencia, o miedo relacionado con la privacidad física. Y frecuentemente todas estas emociones son más antiguas que la relación que están teniendo, aún más antiguas que esta vida. Puede haber traumas muy antiguos en aquellos chakras inferiores que han dejado profundas cicatrices emocionales.

Quisiera recomendar, específicamente a las mujeres que reconocen este dolor, que conozcan de las vidas en las que fueron las ofensora/agresora (lo opuesto a la víctima). O, si es difícil para vosotras acceder a vidas anteriores, entrar en contacto dentro de vosotras con la ‘energía de la agresora o mujer poderosa’.

Esto puede sonar muy extraño, pero ésta es la razón. Cuando habéis sido víctimas de la malestar fisico, esto ha generado mucha ira en vuestro campo de energía. Puede haber cólera ahí de varias vidas pasadas. Esta ira las bloquea y las mantiene aprisionadas en un sentimiento de impotencia y de victimización. Para liberar la ira vosotras necesitáis comprensión.

Necesitáis comprender por qué y para qué; Necesitáis ver la imagen más grande. Imaginaros a vosotras mismas como una mujer poderosa que pudo ser despiadada y cruel con los hombres, y sentid por dentro que esto también es parte de vosotras, entonces la ira se puede desintegrar.

Puede emerger un entendimiento más completo, un conocimiento interior de que formáis parte de una historia kármica mayor, en la que jugasteis tanto el rol de agresor como el de víctima. Es prácticamente imposible liberar vuestras emociones de dolor, impotencia y victimización, sin mirar también vuestro otro lado, el ‘lado oscuro’.

No necesitáis necesariamente volver atrás hacia vidas pasadas para reconocer esta parte oscura dentro de vosotras. También podéis volveros más conscientes de ésta observándoos a vosotras mismas en el día a día de vuestras vidas. Cuando sentís esta energía (por ej. el quiero de ejercer poder o herir a otros), podéis notar que vosotras no habéis sido solamente la víctima indefensa de las circunstancias externas.

Hay ligazones kármicas entre el agresor y la víctima: ambos roles reflejan aspectos de vosotras mismas.

Tan pronto como sepáis y aceptéis vuestro lado oscuro, podréis entonces observar vuestras propias perjudicadas internas de un modo diferente y comenzar a perdonar. Cuando hay comprensión la cólera se puede disgregar y entonces podéis entrar en contacto con la capa de emociones que hay debajo; la tristeza, la angustia, el dolor que está ahí en muchas capas, también en el cuerpo mismo.

Es muy importante para las mujeres reconocer el aspecto agresor en ellas mismas y trabajar con él. Cuando hay aversión y rencor en vosotras con respecto a la fisicoidad, comprended que cuanta más aversión y rencor sintáis, más os autentificáis con el rol de víctima y más os despojáis a vosotras mismas de vuestra libertad.

Tratad de sentir dentro de vosotras que en la arena de la fisicoidad se está representando un juego kármico, en el cual habéis llevado a cabo ambos roles, siendo tanto el chico bueno como el malo. Desde ahí podéis acceder a un lugar de perdón: perdonándoos a vosotras mismas así como también a alguien más.

Las cosas suceden por alguna razón. Los actos de malestar y represión pueden parecer sin sentido, pero siempre hay una historia detrás de eso. Y cada vez que está implicada la malestar fisico, ésta deja profundas huellas en todos los cuatro niveles del ser humano.