La mariposa esta asociada a los viajes entre los mundos en busca del conocimiento, atravesando fronteras y con las experiencias propias de la inconsciencia que nos enriquecen.

La mariposa es símbolo de los «sidhe» (mitología celta) y representa una metamorfosis, una transición metafórica de los espíritus que esperan renacer, irse en el otro mundo para aparecer en este en un perpetuo intercambio. A estos espíritus que han de volver a nuestro mundo, se les solía representar como a las hadas montados en mariposas, para recordarnos el simbolismo de este aspecto transformador.

Es el símbolo de la transformación total, representa la quieras de cambio y de mayor libertad y a la vez valentía.

En la antigüedad se creía que la transformación asombrosa de la mariposa era similar al viaje del alma de un cuerpo terrenal a un cuerpo espiritual. Es símbolo de inmortalidad, de renacimiento y resurrección.

Que una mariposa blanca entre en tu casa en primavera o verano significa que tu suerte va a cambiar para mejor.

En griego su nombre es psyche al igual que alma. Se pensaba que la psyche salia volando de la boca del que se va como si fuera una mariposa.

En el sueño es anuncio de buena suerte y prosperidad.

La mariposa simboliza la ligereza, la inconstancia, y la imprudencia. Pero en la mariposa también existe otro símbolo y es el de su transformación desde una oruga hasta una hermosa y ligera mariposa, con lo que simboliza al alma, desde el cambio de ciclos y al renacimiento bajo una forma más elevada.

Cuando termina un ciclo en el cuerpo humano, es idéntico a lo que sucede cuando una mariposa emerge de su capullo. El capullo puede compararse al cuerpo humano, pero no es idéntico a tu ser real, sino que se trata solamente de la casa donde vive por un tiempo. Irse de aquí, es mudarse de una casa a otra mucho más bella.