Los Angeles de los meses
“No olvidéis demostrar vuestra hospitalidad a los extranjeros, porque por ella, algunos de vosotros habéis hospedado a Angeles sin saberlo”. (Hebreos, XIII:2)
La palabra Angel se deriva de: “angelos”, del idioma griego que significa: “mensajero”. La palabra hebrea: “Malakh”, para Angel, también significa: “mensajero”, y ambas coinciden con la palabra persa para ángel: “angaros”, que también significa: “mensajería”.
Aunque la palabra “Angel” se utilizaba para describir a cualquiera que llevara un mensaje a otro, ya fuera un ser humano o un espíritu, sin embargo, en algunas religiones, los Angeles están considerados como emisarios espirituales que traen mensajes para ayudar a la humanidad, mientras que los ángeles caídos, o espíritus inferiores, traen misivas para llevar a la gente por el mal camino, y causar toda una serie de estragos en la tierra.
Puesto que todo tiene su razón de ser, todo tiene, por lo tanto, su nombre propio, y deriva, directa e indirectamente, de la influencia del Creador, y de la luz que dá a todas las cosas a través del Cielo, y de los planetas, y los nombres a cada una de ellas son dados por alguna cualidad especial, y por alguna razón en particular. Por lo tanto, cada nombre tiene un significado, una influencia celestial, y una misión, aunque éste cambie con frecuencia. Sin embargo, cuando los dos significados del nombre armonizan, entonces la fuerza de voluntad, y el poder, se convierten en iguales.
Cada mes tiene designado a su propio Arcángel, o su Angel, y ellos son los que enseñan a los hombres a utilizar todo lo que nos ofrecen, pero con el fin de ayudar a la humanidad a prosperar, y también nos conceden lo que pedimos cuando les invocamos:
El Ángel de Enero – Gabriel (o Cambiel)
Gabriel nos enseña a hacer balance de nosotros mismos y de lo que estamos haciendo con nuestras vidas. También nos ayuda a ser tan honestos como pacientes, pero al mismo tiempo. Gabriel transmite la sabiduría y nos ayuda a buscar la comprensión de las lecciones que deben ser aprendidas.
El Arcángel Gabriel es uno de los cuatro Arcángeles principales (Príncipes de los Angeles). Su nombre significa “Dios es mi fuerza”. Gabriel está considerado como el Arcángel de la Anunciación, la Resurrección, la Misericordia, de la Muerte y el Apocalipsis. También es conocido por ser el mensajero de las buenas noticias, y de guiar las almas en su viaje de regreso al Paraíso. El planeta que rige Gabriel es la Luna, y utiliza la energía femenina para ayudar a la gente en la interpretación de sus sueños y premoniciones. También utiliza la energía que emana de la Luna para inspirar a los hombres.
A Gabriel se le puede invocar para ayudarnos a librar nuestras emociones más negativas, como el pesimismo, la bajón, la nostalgia, el remordimiento, las frustraciones, los rencores, la envidia, etc., y todos aquellos sentimientos, y emociones, que afectan negativamente a nuestras vidas en el día a día. En la tradición persa, Gabriel esá considerado como el Arcángel Guardián con más poder entre los demás, y es invocado para ayudar a vencer a los demonios durante los exorcismos, y también para las limpiezas de energías negativas. Ayuda en los partos, y también a los recién nacidos. Gabriel lleva una trompeta para despertar el interior de las personas, además de anunciar buenas nuevas.
El Ángel de Febrero – Barchiel (o Barakiel)
Barachiel está considerado como el Angel de la Paciencia. Barachiel nos enseña a apreciar la primavera, después de haber pasado el invierno, y también a apreciar en su justa medida lo que ambas estaciones tienen que ofrecernos. El nos ayudará a finalizar todo lo que hayamos empezado en invierno, así como todo lo que no hayamos acabado. Barchiel, o Barakiel, también nos ayuda a preparar los nuevos objetivos a alcanzar. Barakiel nos ayudará a librarnos de la angustia que podría suponer la soledad, y nos ayuda a sacar buen partido de ella, además de poder apreciar la tranquilidad de la que hayamos aprovechado en el invierno. Barakiel nos ayuda en las eventos internas y en nuestras contradicciones, e invocarle a él nos llevará a zonas más tranquilas donde poder recuperar la energía. El invocar a este Angel, por su nombre también, significa que nos enseñará a utilizar las energías positivas, así como para apreciar todo lo que tenemos.
El Angel de Marzo – Malchidiel (o Machidiel, o Malahidael)
Este Angel potencia nuestra resistencia física y mental, así como nuestro valor a la hora de enfrentarnos a algunos obstáculos. Es un Angel de primavera, es decir: de renacimiento, y nacimiento. Febrero se va alejando y aparecen las primeras flores, los días son más largos, y durante este nuevo mes, Malchidiel nos ayudará a confiar más en nosotros mismos, y también a seguir adelante con los nuevos proyectos que irán avanzando a medida que las horas del día, y la luz del Sol, vayan aumentando.
En Primavera se siembran las semillas que crecerán en verano cuando el Sol brille en lo más alto. Este Angel nos ayuda a encontrar trabajo, o a empezar nuevas tareas. También nos ayudará a cumplir con nuestros compromisos en el día a día.
El Ángel de Abril – Asmodel
Este mes es el más apropiado para todo tipo de nuevas empresas. Las iniciativas, los comienzos, tanto en nuestro interior, como en el exterior, o en el mundo que nos rodea, empiezan a florecer. Este Angel nos enseña a apreciar, en su justa medida, todo lo que signifca despertar y, muy especialmente, en la naturaleza.
El Ángel de Mayo – Ambriel (o Ambiel)
En Mayo, todo lo que se ha sembrado en los meses pasados empezará a florecer. La vida empieza un nuevo ciclo y Ambriel nos guía a la hora de desarrollar nuestras habilidades y también nuestro potencial. Ambriel nos facilita el conocimiento interior de cada uno de nosotros, así como el despertar de nuestro lado más espiritual, y, por lo tanto, a buscar la verdad. Es un Angel protector. Invocar a este Angel en su mes significa que recibiremos protección y muy buena suerte en todo lo que hagamos.
El Ángel de Junio – Muriel
Este mes simboliza el fin de la primavera y el principio del verano, y Muriel nos anima a involucrarnos con la naturaleza y con todo lo nuevo que ha florecido, tanto en nuestro interior, como en el exterior. Muriel nos empuja a continuar con nuestros proyectos, por muy ambiciosos que sean, y muy especialmente con los que estuvimos gestando durante el invierno. Nos ayuda a servirte de de todo lo que ha nacido, o se ha renovado. Es hora de renacer, de rejuvenecer, por dentro, pero también, por fuera.
El Ángel de Julio – Verchiel
La relajación, las vacaciones, el hecho de haber cumplido con nuestros compromisos. Verchiel nos ayuda a servirte de de todo ello, y también a recargar nuestras baterías, para seguir divirtiéndonos y ser felices en el día a día. Verchiel nos ayuda a apreciar todo lo que nos rodea, y también la naturaleza en todo su esplendor, así como a darnos cuenta de lo que deberíamos prescindir, y a potenciar todo lo bueno que llevamos dentro. Invocar a Verchiel significa que nos guiará a la hora de servirte de nuestro tiempo de ocio y diversión, y a mirar atrás para saber lo que hemos hecho mal y lo que debemos corregir.
También nos ayudará a apreciar lo que hemos conseguido. Verchiel nos guiará a la hora de hacer un viaje de introspección interior y analizar lo obsoleto para poder separarlo de lo realmente útil. Verchiel nos ayudará a confeccionar una lista de prioridades en las que poder ver, con la claridad necesaria, todo lo que tenemos y de lo que debemos prescindir. El nos ayuda a que nuestro corazón se vuelva mucho más generoso, primero con nosotros mismos, y después, con todos los demás. Verchiel es el protector de todo lo relacionado con el intelecto, y nos enseña a desarrollar, y potenciar, el lenguaje, el aprendizaje y todo lo relativo al área intelectual.
El Ángel de Agosto – Hamaliel (o Gamaliel)
Hamaliel nos ayuda a la hora de revisar las tareas pendientes, y a ponernos al día con las atrasadas, pero también nos invita a hacer cambios en nuestras costumbres, o hábitos, que nos ayuden a ganar en calidad de vida. Nos empuja a desarrollar nuestras habilidades para que sigamos avanzando hacia nuestro éxito personal, profesional, o intelectual. Hamaliel nos enseña a ser perseverantes, y a usar nuestra lógica. Nos ayuda a desarrollar la responsabilidad y a resolver los tensiones más complejos. Hamaliel también nos ayuda a ampliar perspectivas, y a sacar provecho de nuestra capacidad de pensamiento de una forma tan lógica como práctica.
El Ángel de Septiembre – Uriel (o Zuriel)
El verano está a punto de finalizar y es momento de preparar proyectos, y objetivos, de cara al otoño y, posteriormente, al invierno. Empezamos otro nuevo ciclo tanto en la naturaleza como en nuestra naturaleza interior. Uriel nos anima a hacer balance de nuestras vidas y a sopesar los pros y los contras de todo lo que hayamos hecho hasta ese momento. El nos ayuda a reconocer nuestros éxitos, y a aprender de nuestros errores. Uriel nos anima a desarrollar nuestro lado más creativo y también a fomentar las premoniciones. Le invocamos también para que nos ayude a desarrollar nuestras capacidades psíquicas, o visionarias. Uriel es muy útil a la hora de liberar resentimientos, y empezar por perdonarnos a nosotros mismos, además de a todo el mundo. Uriel nos ilumina con sus rayos divinos a la hora de convertir recuerdos negativos en positivos, lo cual nos ayuda a alcanzar la paz con nuestro pasado. Nos motiva a la hora de convertir frustraciones por éxitos.
Uriel también nos envía el resultado final de nuestros sueños en forma de experiencias poco agradables, pero con el fin de convertir todo lo nuevo, y benéfico, en algo agradable. Uriel nos enseña a potenciar el amor que nos profesamos a nosotros mismos, y a los demás, con el propósito de poder resistir cualquier perturbación desde el exterior. Uriel nos devuelve la paz, y la armonía, interior cuando le invocamos. También nos enseña a distinguir el camino equivocado del correcto en el área espiritual, y es conocido como el Angel del Arrepentimiento. Es protector de todo lo relacionado con el área intelectural, con la música y con todas sus formas de expresión. Es el Angel de la transformación, de la paz, y también es muy apreciado con curar la estupidez en los seres humanos.
El Ángel de Octubre – Barbiel
Barbiel es el Angel del recogimiento, de revisar todo lo que se ha conseguido durante el año, y analizar si eso es precisamente lo que queríamos. Barbiel nos ayudará a ver lo que en realidad hemos conseguido, y a separar nuestros quieros de las realidades. Barbiel aporta claridad y honestidad a todo lo que hacemos, y también amplitud de miras en todo lo que hemos hecho, y esto nos ayuda a entender, y a conocer, donde están nuestros límites, y cuales son los recursos naturales de los que disponemos. Barbiel está asociado con Barachiel (Arcángel de Febrero), y es uno de los veintiocho Angeles de las veintiocho mansiones de la Luna, y cada fase de la Luna cuenta con un Angel. En el mundo inferior, Barbiel es uno de los siete Angeles bajo la soberanía de Zafiel.
Barbiel está considerado, por lo tanto, como un angel caído, (los ángeles caídos, o espíritus inferiores, no están en contra de Dios, del que dependen también, como el resto de Angeles, sino que están en contra de los hombres ) pero este ángel caído también ayuda al Arcángel Gabriel y a Uriel, empujando a la gente a caminar de forma segura en la vida. Si se invoca a Barbiel, él cuidará de nosotros cuando tengamos alguna enfermedad y estemos convalecientes, y también nos ayudará a recuperarnos mucho antes de cualquier enfermedad. Barbiel también nos ayudará a cuidar de nuestros hijos y de todos aquellos a los que se lo pidamos. Cuando se invoca a Gabriel y a Uriel, seguramente nos enviarán a Barbiel para que nos ayude en todo. Barbiel siempre estará dispuesto a ayudarnos y nos rodeará de amor y atenciones, muy al contrario que otros ángeles caídos como él.
El Ángel de Noviembre – Adnachiel (o Advachiel)
Este Angel de Noviembre nos insta a prestar apoyo a todos aquellos que lo necesiten una vez hayamos alcanzado nuestros propios objetivos. Las relaciones con los demás durante este mes son muy importantes porque, seguramente, acabaremos dependiendo de ellos, o ellos de nosotros, durante algunos meses más para ayudarles, o que nos ayuden, a alcanzar nuestras metas. Adnachiel nos ayuda a conservar nuestros canales de comunicación en todas las áreas de nuestra vida en general. También es el Angel de la independencia, y de la orientación, a la hora de encontrar el camino correcto en nuestras vidas. Las diferentes tradiciones religiosas dicen que este Arcángel ejerce el control sobre los cuatro elementos: tierra, viento, fuego y aire.
Adnachiel lleva una vela en la mano e ilumina con ella a los recién nacidos a los que cuida con amor y dedicación. Este Arcángel ayuda a despertar el lado más espiritual de las almas de los seres humanos. Adnachiel nos ayuda, y nos guiará, a saber lo que queremos hacer realmente en la vida. Es el Angel de la orientación en cualquier sentido, tanto en el material como en el existencial. Invocar a Adnachiel significa recibir protección y muchas otras bendiciones, como la independencia, la confianza en uno mismo, para evitar la timidez, o la falta de auto-estima, la honestidad, la generosidad y la humildad. Adnachiel ayuda a los que van abriendo caminos y que son seguidos por los demás, así como a los que corren experiencias con el fin de alcanzar unos objetivos algo temerarios. Las diferentes tradiciones religiosas mantienen que Adnachiel tiene un amuleto colgado de su cuello que cuando implanta en alguien que le ha invocado, le cura todo tipo de enfermedads. Adnachiel siempre escuchará las peticiones de ayuda de los devotos.
El Ángel de Diciembre – Anael (Hanael, o Haniel)
Entramos en el invierno, con poca luz y la débil luz del Sol, y la vida sigue en nuestro entorno, lo cual significa que es el mejor momento para agradecer todo lo que hemos logrado durante el año, y también para hacer partícipes a los demás de todo lo que hemos conseguido, y celebrarlo con ellos. Hanael es el Arcángel de la Comunicación Divina. En la Cábala se le considera como el que transportó a Enoc en sus viajes al Cielo. Es un Angel con mucha autoridad que ayuda a que cumplamos las misiones que nos han encomendado en la tierra, y fomenta el amor para reunirnos con Dios, gracias a la confianza en nosotros mismos, a la fe que profesemos, y a las habilidades más elevadas de que dispongamos. Se invoca a Haniel para pedir fuerza, y perseverancia, cuando nuestra resistencia empieza a debilitarse.
Hanael potenciará nuestros sueños premonitorios, las premoniciones, las revelaciones, y todo lo relacionado con las ciencias ocultas. Haniel nos ayuda a librarnos de la tristeza, la angustia, las preocupaciones, y la confusión en nuestras vidas, guiándonos hacia la luz espiritual que es la que nos ayudará a encontrar el camino de salida de nuestro laberinto existencial.Haniel se encargará de ayudarnos a encontrar las piezas sueltas que podríamos haber perdido de nuestras almas, y a volver a componerlas, restaurándola en su totalidad. Todo se puede regenerar, incluso lo que parece que nunca podría haber sido regenerado. No hay que perder la fe en Hanael.
El Arcángel Haniel es amor, belleza y amistad, y nos ayuda a llenar los vacíos que pudiera haber en nuestras vidas, y también a recuperar una actitud positiva y esperanzadora. Cuando nos invade la tristeza, o la melancolía, e invocamos a Haniel, él puede guiarnos hacia experiencias maravillosas y llenar nuestras vida de alegría y armonía. También nos enseñará a encontrar la felicidad en nuestro interior, y a solucionar todos los tensiones que pudiéramos tener. Una vez hayamos encontrado esa felicidad y armonía, entonces la proyectaremos hacia fuera y podremos ayudar a los demás. El Angel Haniel nos ayuda a concentrarnos en las meditaciones, y también a canalizar mejor nuestra energía interior.
No olvides que al invocar a uno de estos Arcángeles, debes flamarlo por su nombre y atenderá enseguida aunque no creas en El, porque El siempre habrá creído en ti, y te ayudará de igual forma.
Me agrado
Awesome!
Amazing!
Cool!
Maravilloso gracias
Bere Elizondo
October is Barbiel with us