Para amenizar el espacio de mama es recomendable tener estos tres elementos:

1- cuarzo rosa en forma de corazón

2- sal marina perfumada

3- agua

4-Una varita magica

Proceso del ritual:

1) tomar el cuarzo rosa ponerlo sobre un altar improvisado

2) rociar la sal marina perfumada en un círculo alrededor de él cuarzo

3) tomar el agua y poner un poco de la misma sal marina en ella

4) poner el cuarzo rosa en el agua salada

5) ponga su mano más poderosa ( escoja cuál es su mano con más poder) dentro del agua con la piedra en la que dirá lo siguiente:

repita tres veces

«Madre mia
escucha mi súplica
que mi piedra
te de paz y armonia cuando estes aquí».

7)

Pon la Varita mágica dentro del agua salada y esparce el liquido en dirección a las manecillas del reloj, sacudiendo la varita, salpicando en forma de circulo, despues de terminar el agua sacude la varita e impulsa la energía hacia ti con la varita, como si fueras a invocar el viento con la varita, (estas jalando la energía del amor hacia ti)

8) tomar la piedra y secala.

9) pon la piedra en el espacio destinado a que habite tu madre.

Ten mucha FE en el poder de la energía que has activado- confía en ti mismo ( todos tenemos poder y magia interior).

Luego de tener los objetos, debemos ubicar el recipiente de vidrio con agua limpia cerca de una ventana o una terraza, si se tiene, y poner la piedra. Pero antes de hacerlo, debemos ponerla bajo nuestra nariz y limpiarla con nuestra respiración. Después, llevar el cuarzo al corazón, programándolo para que nos apoye a expandir esa energía de amor en nuestro ambiente pensando siempre en nuestra querida madre.

Los pétalos de las flores, que han de ser de rosas rojas, blancas, nardos, margaritas, y deben estar limpios, los colocamos dentro del recipiente y dejamos junto a la piedra y el agua, toda la noche.

Al día siguiente esparcimos el líquido en casa, de afuera hacia dentro, hasta llegar a la habitación de mamá.

Este sencillo pero eficaz ejercicio va a hacer que ella se sienta más relajada y con una energía de amor incondicional muy fuerte que la va a envolver.

Se va a sentir tan bien en tu casa que no querrá marchar.

Igualmente puedes hacer este ritual para algún invitado que tenga que venir a tu hogar o para invocar a tu pareja ideal.